El título del primer disco de Alanis Morissette en 8 años, Such Pretty Forks in the Road , resume realmente bien el espíritu de las once canciones. En todas y cada letra uno puede encontrarse con la canadiense en el modo perfecto y más sincero posible.
agosto 2020
Hay depresión, adicciones y bastante dolor. Mas esas «bifurcaciones» en su camino están abordadas desde una belleza prácticamente irónica. Es que si uno escucha las canciones sin prestarle atención a las dolorosas imágenes que se transmiten en las letras podría llegar a meditar que se está encarando a un álbum de agradecimiento.
Sentada en frente de su piano, Morissette canta con un tono dulce mientras que se acompaña de arreglos con aires optimistas. El ejemplo más claro es «Reasons I Drink». Sobre un ritmo sincopado y un estribillo con ADN pop-rock, la vocalista aborda sus inconvenientes con el alcohol.
Con una armonía de forma perfecta tarareable, la vocalista comenta que sus inconvenientes están relacionados a una vida cargada de presiones: «Trabajo desde el momento en que tengo memoria, desde el momento en que tenía un solo dígito».
Más adelante, dice:b«Nada puede darme un respiro de esta tortura».
La mayoría del Such Pretty Forks in the Road va por ese lado.
Origen: Alanis Morissette lanzó su primer disco en ocho años y presenta sus letras más honestas