La piel sana hace que nos sintamos mejor, y hay productos para ello, pero ¿Por qué sentimos la música en la piel?
¿Qué importancia tiene la piel, nuestro órgano más expuesto, para mantenerse sano? Nos protege, en mayor o menor medida, de los agentes externos, del calor y del frío y de las bacterias. Pero también absorbe las sustancias químicas nocivas y los contaminantes. Al igual que el cabello y las uñas, refleja la salud física y mental. La salud de la piel es importante, y hablaré de ello en este post, a la vez que os recomiendo usar los mejores sérum facial, pero, me interesa saber por qué decimos o sentimos eso de “la música en la piel”. Pensemos también que hoy en día hay cosas que funcionan muy bien para el cuidado de la piel.
Las brumas hidratantes y el Serum son algo perfecto para el trabajo previo: antes de un tratamiento habitual de cuidado y salud de la piel. Si, tanto el sèrum como la bruma se usan hoy en día para preparar la piel. Primero el sèrum, con el rostro limpio y seco para que actúe como fijador del maquillaje. También puede utilizarse cuando sientas que tu piel necesita una hidratación extra. La bruma facial se puede utilizar de tres maneras: antes del tratamiento habitual, con el rostro limpio y seco, para preparar la piel para las cremas o hidratantes; sola, como fijador del maquillaje; y después de aplicar las cremas o hidratantes, cuando sientas que tu piel necesita un extra de hidratación.
¿Qué importancia tiene la piel sana?
Mirando el interior del cuerpo, es difícil creer que la piel sea algo más que una capa protectora, porque no solo es eso. En una buena tienda de cosméticos naturales podemos ver productos que parecen haberse basado en una buena investigación. Porque si se observa con detenimiento, la piel es algo más que una capa protectora: es un órgano complejo con muchas funciones vitales. Al igual que sus parientes, el pelo y las uñas, refleja la salud física y mental. Y curiosamente la música también puede influir en su salud. O al menos eso aseguran algunas de las fuentes consultadas y puede que algún estudio de expertos.
La piel, tan fina y frágil, es más que una capa protectora. Nos protege de los elementos, sí, pero también tiene muchas otras funciones vitales. Al igual que sus parientes el pelo y las uñas, refleja nuestra salud física y mental.
“Es sólo piel”, dice alguna canción. Pero no nos engañemos: la piel es mucho más que eso. De hecho, eso es exactamente lo que los investigadores han descubierto en los últimos años: la piel es un órgano complejo con muchas funciones vitales. Y puede que por eso sea un elemento recurrente de canciones como alguna de Radio Futura.
La piel es una porción única de nuestro cuerpo porque es la única parte de nosotros que está expuesta al mundo exterior en todo momento. Como tal, representa un “puente entre el yo y el entorno”, según el grupo musical The Doctors, significa que es muy vulnerable a las influencias ambientales, como la exposición al sol y la contaminación. Y yo me pregunto qué hacen unos músicos dando lecciones de anatomía… Pero sea como sea, el caso es que la piel puede desempeñar un papel fundamental en el mantenimiento de una buena salud, ya que protege al resto de nuestro cuerpo de esas influencias nocivas y facilita la absorción de los nutrientes de la comida y la bebida (por eso nos ponemos enfermos cuando estamos muy resfriados).
Además de ayudarnos a absorber los nutrientes de la comida y la bebida, la piel también nos ayuda a absorber el agua en nuestro cuerpo controlando la cantidad de agua que sale de nuestro sistema en forma de orina o sudor.
La piel, que es una de las primeras cosas que vemos cuando conocemos a alguien, nos dice mucho sobre las personas. Si pones una canción y ves que se le “eriza la piel” es que estamos ante una persona sensible, y probablemente buena. Pensemos que es el órgano más grande del cuerpo y su papel en nuestra salud es vital. A lo largo de los años, los investigadores han descubierto que la piel tiene algo más que una simple capa protectora. La piel es en realidad un órgano complejo con muchas funciones vitales, al igual que el pelo y las uñas.
Podría decirte que un estudio reciente descubrió que la piel puede utilizarse para detectar células cancerosas y predecir cómo reaccionarán a determinados medicamentos. O que otro estudio sugiere que, si quieres saber cómo de sano está tu hígado, mira tus pies. Pero no te lo diré… Y si te preguntas si estás gestionando bien tus niveles de estrés, mírate al espejo: porque el estrés puede aparecer en tu cara en forma de líneas de expresión. La piel también puede reflejar la salud mental: la ansiedad y la depresión suelen correlacionarse con cambios en el color del vello facial y corporal (es decir, canas o adelgazamiento del cabello).
Es asombroso lo que podemos aprender sobre nosotros mismos observando de cerca el órgano más grande del cuerpo.
La piel es un órgano complejo que tiene fama porque es aquello sin lo que no podemos vivir. La tocamos, la miramos, nos bañamos en el agua y sudamos en todo tipo de clima. Es la parte de nosotros que la gente ve, a la que la gente le canta… Y sin embargo… la piel es poderosa. Nos protege de los agentes patógenos, las infecciones y las lesiones. Nos mantiene calientes y regula nuestra temperatura corporal. ¡Dicen que tienes, veneno en la piel! ¡Y es que estas hecha de plástico fino! Evita la deshidratación cuando sudamos y absorbe el resto. Ayuda a regular nuestro metabolismo, enviando señales a nuestro cerebro cuando tenemos hambre o sed.
Incluso se afirma que desempeña un papel en la regulación del estado de ánimo, aunque el modo en que esto ocurre exactamente sigue siendo un misterio para los científicos.
La piel tiene dos capas: la epidermis y la dermis. La epidermis es la capa exterior, que comprende aproximadamente una quinta parte del grosor de la piel. Esta parte contiene queratinocitos, que son las células responsables de producir queratina y melanina -la proteína resistente que compone tu pelo, uñas y piel; el pigmento responsable de darte tu coloración. Cuando se rompe, tu piel se desprende en escamas llamadas “células muertas”.
Sí, la piel es el órgano más grande del cuerpo humano y está compuesta por múltiples capas.
Las numerosas funciones de la piel incluyen la regulación de la temperatura; las sensaciones como el dolor, la presión, el picor y la temperatura; la síntesis de la vitamina D3; la excreción; la síntesis de feromonas; la pigmentación; el crecimiento del pelo; las respuestas a la inflamación, como la cicatrización de heridas; la función inmunitaria; la producción de sebo (aceite); la homeostasis en los mamíferos; la impermeabilización a través del factor natural de hidratación (NMF), compuesto principalmente por urea, ácido láctico, aminoácidos y glicerol…
