¿Por qué el NAIM NAIT 50 está volviendo locos a los amantes del hi-fi? El NAIM NAIT 50 baja de precio y dispara la nostalgia retro
El amplificador estéreo NAIM NAIT 50 no solo es bonito, también es brutalmente bueno. 🌀
Nunca pensé que una caja metálica con botones anticuados y conectores DIN en lugar de los típicos RCA pudiese emocionarme tanto. Pero entonces vi el NAIM NAIT 50 sobre la estantería, con ese aire retro descarado, mitad laboratorio de física de los años 80, mitad joya de diseño industrial británico. Fue un flechazo. De esos que no se explican, como cuando hueles algo y de pronto te ves en casa de tu abuela viendo “Verano azul”.
Claro, el precio original asustaba un poco. £2699 no es calderilla ni siquiera para un coleccionista de vinilos con tres giradiscos y seis tipos distintos de agujas. Pero ahora, con su precio desplomado hasta las £1199, lo que era capricho se vuelve oportunidad. Eso sí, tendrás que apuntarte al VIP Club de Peter Tyson, pero es gratis y tarda menos que encender una válvula.
“Es divertido, directo, y suena como si mordiera los graves y acariciara los agudos.”
No soy el único que se ha quedado embobado. En los cuarteles de prueba de What Hi-Fi, lo describieron como “increíblemente divertido… con un montón de detalle, claridad y pegada”. Y el editor técnico, Ketan Bharadia, lo llamó “cachorrito eléctrico”. No sé si eso aparece en los manuales de ingeniería de sonido, pero entiendo perfectamente a qué se refiere.
Origen: Quick! Naim’s musical, retro-looking Nait 50 amp has crashed to its lowest ever price
Un viaje sonoro directo a 1983 con motor del futuro
El Nait 50 no es solo una cara bonita. Es un homenaje vivo al mítico Nait 1 de 1983, el amplificador que puso a Naim en el mapa de la alta fidelidad. Pero también es un lobo con piel de cordero: por dentro late el diseño de amplificación del NAP 250 de 2023, con una sección de phono y de auriculares completamente renovadas. Suena a pasado, pero se comporta como si acabara de salir del laboratorio más fino de Salisbury.
No hay Wi-Fi. No hay Bluetooth. No hay DAC ni mandos remotos. Solo sonido analógico, directo, sin anestesia. Eso no es una limitación: es una declaración de amor a lo esencial. Si quieres tecnología conectada, busca otra marca. Si quieres música pura, como si estuvieras metido en el estudio con Miles Davis o en un garaje con The Clash, esto es lo tuyo.
“Pocos aparatos suenan tan honestos como este ampli retro-futurista.”
Y ojo: solo se han fabricado 1.973 unidades, un guiño al año en que nació Naim. Así que no, no lo verás en cualquier casa. Es como tener un vinilo prensado en Japón o una edición limitada de un Rolex vintage: no solo se disfruta, también se presume.
El purismo británico se impone con fuerza
Todo en el Naim Nait 50 grita “menos es más”. Sus 25 vatios por canal en clase A/B parecen poco sobre el papel, pero una vez lo conectas a un buen par de columnas sensibles, te das cuenta de que sobran los números. Tiene más empuje que muchos amplificadores que duplican su potencia. Y lo hace sin distorsión, sin florituras digitales, sin envoltorios de colores. Solo música.
Los puristas aplauden ese retorno a lo básico. Nada de apps ni actualizaciones por firmware. ¿Quién necesita eso si lo único que quieres es perderte durante horas escuchando un concierto de Dire Straits o un solo de cello de Jacqueline du Pré?
Los que lo han probado dicen que incluso supera en matices al Nait XS 3 de £2199. ¿Estamos ante el caso extraño en el que la nostalgia, por una vez, suena mejor que el presente? Puede que sí.
“Como se explica en esta reseña práctica del Nait 50, lo retro puede ser sinónimo de exquisito”.
El detalle que lo cambia todo
Y ahí está el matiz: este amplificador no es para todo el mundo. Es para el que aún se emociona con el chasquido de una aguja al caer, para quien ajusta el balance de su sistema con mimo casi monacal, para el que cree que escuchar música no es multitarea sino ceremonia.
¿Te gustan los amplificadores que se conectan por Wi-Fi a tu nevera inteligente? Entonces sigue buscando. Pero si lo tuyo es cerrar los ojos y sentir que el bajista está respirando justo a tu izquierda, esto es una invitación en papel de lino.
“El Naim Nait 50 no se conecta a internet, se conecta contigo.”
“Quien no entiende la música, la decora con efectos.” (Frase anónima de vinilo encontrado en Camden)
“Toda tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia.” (Arthur C. Clarke)
La oportunidad que no sabías que estabas esperando
Lo más curioso es que este aparato fue lanzado en medio de una celebración: los 50 años de Naim. Algo simbólico, casi ceremonial. Pero como pasa con los buenos discos en directo, a veces el contexto es tan importante como el contenido.
Que ahora cueste £1500 menos que su precio de salida no es solo un chollo, es una especie de broma cósmica. Una que solo entenderán quienes saben que el valor de algo no siempre está en lo que puede hacer, sino en lo que decide no hacer. Y el Nait 50 decide no distraerse. Solo sonar. Y sonar muy bien.
Ahora bien, ¿cuánto va a durar esta oferta en Peter Tyson? Nadie lo sabe. Tal vez ya estés llegando tarde. Tal vez en este momento alguien en Mánchester está haciendo clic en “comprar ahora” y quedándose con la última unidad. Tal vez no.
Pero si aún está ahí, y tú tienes un giradiscos hambriento de personalidad, el momento es ahora.
¿Estamos ante el último gran amplificador puramente analógico del siglo? ¿O será el primero de un nuevo renacimiento del hi-fi emocional y sin cables?